viernes, 21 de febrero de 2014

CUANDO SE INVIERTEN LOS PAPELES


Como la “ bancarrota moral de occidente” calificó recientemente a Estados Unidos el presidente de Rusia, Vladimir Putin por apoyar el matrimonio homosexual y poner el tradicional en el mismo nivel del entre personas del mismo sexo. “Las políticas que se están llevando a cabo en estos lugares al poner en el mismo nivel a una familia con hijos y una asociación entre personas del mismo sexo, o al poner al mismo nivel una fe en Dios y la creencia en Satanás, este es el camino a la degradación” dijo el presidente ruso. Es más, en Diciembre pasado Putin calificó a Rusia como nación defensora de los valores tradicionales.
A Principios de los años 70 y a pocos años de convertido al evangelio de Cristo me deleité leyendo el libro titulado “El Contrabandista de Dios”. Ahí se relata la historia de como el Hermano Andrés un misionero holandés introducía biblias a países comunistas en donde éstas eran prohibidas y los cristianos perseguidos. Este gran hombre de Dios es autor de varios libros, entre ellos el ya mencionado y otros como un Ejército de Luz, 15 Días gratis sin Dios y muchos más. Toda esta información de alguna manera contribuyó a profundizar mis convicciones cristianas que siempre defenderé porque a eso nos llama Dios.
Quienes pasamos de los sesenta años crecimos escuchando las noticias acerca del acontecer entre dos potencias mundiales, Estados Unidos y Rusia que encabezaba a la extinta Unión Sobiética. La primera anticomunista, cristiana, promotora de los valores plasmados en la Biblia de donde han salido miles de misioneros por todo el mundo con el mensaje evangelio. La segunda comunista, acusada de ser atea, en donde por setenta años las biblias tenían que entrar de contrabando, pero que en medio de la persecución millones de creyentes adoraban a Dios desde la clandestinidad.  En la década de los noventas ya en el ministerio, escuché a uno de nuestros líderes decir que venía de Rusia de recibir a unos siete mil cristianos que habían salido de la clandestinidad tras la caída de a Unión Sobiética, ahora se unían a La Iglesia de Dios, de igual manera que lo hacían otras denominaciones.  Nos contaba el misionero que según testimonios, los hermanos se reunían en sótanos o lugares invisibles, el pastor o el lider les decía que oraran a Dios para que fuera El quien les reverlara en donde sería el próximo servicio para no ser descubiertos. Eso si deberas significa “cristianismo”.  
Esa misma nación que encabezaba el bloque de países socialistas y que desde occidente se le calificaba de atea, ahora su presidente la presenta como defensora de los valores tradicionales y por si fuera poco, da un buen jalón de orejas a Estados Unidos por la pérdida de esos mismos valores. El patriarca Kirill y lider de la iglesia ortodoxa avala lo dicho por Putin y también critica a Estados Unidos, sus países satellites y Europa de “desarmar espiritualente al pueblo”. Pero eso no es todo, un grupo de 14 científicos de Uganda aseguran que contrario a lo que muchos afirman, la homosexualidad no es de orden genetico sino un comportamiento anormal que se aprende por las experiencias que las personas viven. Además,de acuerdo a Richard Tushemereirwe uno de los científicos la homosexualidad acarrea severas consecuencias para la salud.
No soy cientifíco si no un ministro del evangelio de Cristo. Por tanto, no puedo debatir el  dictámen de catorce hombres de ciencia, mi opinion se basa en la Biblia que nos enseña que la homosexualidad es pecado, que debemos amar a los homosexuales porque también por ellos Jesucristo murió en la cruz, necesitan arrepentirse y volverse a Dios.  Hay muchos testimonios de hombres y mujeres que en algún momento cambiaron el uso “natural por el contra naturaleza” como dice Pablo en (Romanos 1:26) pero que han sido alcansados por el poder de Dios y ahora viven vidas transformadas. Con respecto a Estados Unidos, ésta es mi segunda patria, amo a esta nación y oro por sus o nuestras autoridades independientemente de si hacen o no un buen o mal gobierno. La Biblia nos manda a orar por ellas (Romanos 13:1), y a obedecerles, esa debe ser parte de nuestra enseñanza como iglesia a un mundo que cada día necesita más de la gracia divina. Que nuestra oración sea para que Dios bendiga a Estados Unidos, para que retome el rumbo y que no sea una nación sin Dios.  

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