viernes, 18 de octubre de 2013

VAMOS DE NUEVO POR LA REFORMA MIGRATORIA

El retorno a sus empleos de 800,000 trabajadores que habían sido suspendidos por falta de fondos para cubrir sus salarios, quizá sea la mejor noticia de la reapertura del cierre parcial del gobierno de Estados Unidos, entre el primero y el 17 de octubre,  que según expertos  le costó a los contribuyentes unos 24 millones de dólares.  Republicanos y democratas por fin llegaron a un acuerdo bipartidista que reestablece la financiación del gobierno hasta el 15 de enero 2014.  Dicho acuerdo le permite pedir préstamos hasta el 7 de enero, por lo que algunos pronostican otro cierre a principios del próximo año, algo que el presidente dice que no sucederá. Por el contrario llamó al liderazgo de ambas cámaras, pero basicamente al partido republicano a recuperar la confianza del pueblo estadounidense.  De hecho ambos partidos trabajarán mediante un comité que elabore un presupuesto para el 2014 con lo cual se espera que lo ocurrido ahora no vuelva a suceder.
No puede culparse del todo al partido republicano porque es evidente que dentro de ellos hay  una buena representación con más sensibilidad. Sin embargo, como en todo hay un grupo ultra conservador  llamado Tea Party que son quienes imponen su criterio como es el caso de la reforma migratoria. Esta vez el presidente asumió una postura de firmeza con lo cual sienta un buen precedente. Eso mismo llevó a los republicanos a decir: “dimos una buena batalla, solo que no ganamos”.  Ojalá que con esto entiendan que las posturas extremistas aparte de no ser populares hacen daño no sólo al pais sino a su mismo partido. Por el contrario, los demócratas dicen  ahora que esto les beneficia para recuperar el poder en la cámara de representantes en el 2014.
El principal caballito de batalla es la ley de seguro médico llamada Obama Care impulsada por el actual gobierno que facilita seguro accesible a los más desposeídos, una medida que los republicanos han rechazado desde el principio. Para nadie es un secreto que en Estados Unidos el cuidado de salud es carísimo como álguien dijo: “Aquí más que pecado, es delito el enfermarse”. Con la idea de elaborar un presupuesto que evite otro cierre ya se habla de reducir gastos en las obligaciones del gobierno como  beneficios  en costos de salud o aumentar impuestos. Con ello desde luego  quien sale perdiendo es la clase más vulnerable que son las personas de más bajos recursos. En otras palabras, “si no es crudo es quemado”.  De cualquier manera es digno de celebrar que el cierre parcial del gobierno haya lleagado por ahora a su fin.  Que cerca de un millón de personas (800,000) regresen de nuevo a sus puestos después de dos semanas sin sueldo, una medida que desbalanza el presupuesto de cualquier persona de clase media, ya no se diga media baja o baja.
Por otra parte, con la salida airosa del gobierno, el presidente ha hecho un llamado a reublicanos y demócratas a aprobar de inmediato la reforma migratoria. Con el cierre parcial ésta había quedado relegada a segundo plano, según Barack Obama es tiempo de aprovechar políticamente el actual momento en que los republicanos siguen perdiendo popularidad. El presidente le ha llamado tema número dos pero defensores de los indocumentados dicen que debe ser llamado prioridad número uno. Recordemos que el presidente está casi a la mitad de su segundo mandato, la reforma migratoria la había ofrecido en el primero pero no fue posible. La Guerra en irack fue un factor determinante ya que requería la mayor parte de la atención del gobierno pero  ese ya no es el caso. Para algunos más optimistas la aprobación de la reforma migratoria sería un medio eficáz para que los republicanos recobren su imagen.  Los hispanos son al redededor de 50 millones quienes más se beneficiarían al ver realizado del sueño de regularizar su situación legal y es con ellos  que cada día se aislan más los republicanos.
En California recientemente fue aprobada la licencia de manejar para indocumentados pero ésta no entra en vigor sino hasta el primero de enero 2015. Mientras tanto la policia ha seguido decomizando vehículos a conductores sin licencia que al presentarse a pagar la multa algunos han sido arrestados por inmigración. La reforma migratoria es la única solucción para evitar las deportaciones y separación de familias. Como iglesia, ésta debe de ser prioritaria en nuestras oraciones para tranquiladad de todos. Por tanto, urgimos al presidente a no quitar el dedo del renglón con respecto a la REFORMA MIGRATORIA. 

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